Tanto si te estás iniciando en una vida saludable y de respeto por el medio ambiente como si llevas mucho tiempo totalmente dentro de la sostenibilidad, tendrás que utilizar productos ecológicos. Seguro que conoces ya muchos. Sobre todo, los dedicados a la alimentación sana de agricultura ecológica.

En Agro Rosa, queremos darte una pequeña guía que te indique los sectores en los que puedes encontrar productos orgánicos asequibles. Un pequeño paseo introductorio al mundo de la ecología y a cómo vivir en ella, con el respeto al producto y al productor por delante. Y con el respeto a ti mismo, que seguro te mueve cada día a informarte de los alimentos y artículos que consumes. La vida saludable es una vida de concienciación.

¿Qué falta en este listado?

Fuera quedan las “grandes cosas”, como el mobiliario ecológico, la arquitectura y el diseño orgánicos, el autoconsumo energético o el mundo del transporte eco. Desde Agro Rosa, simplemente, te proponemos este pequeño repaso sobre los artículos del día a día. Los alimentos ecológicos, los cosméticos y productos de higiene biológicos, la ropa de algodón orgánico o el mundo de las ecomascotas o el huerto urbano.

¿Te interesa? Pues sigue le yendo.

 

 

Alimentos ecológicos

Los alimentos ecológicos, biológicos u orgánicos (tres formas de denominar al mismo concepto) son aquellos producidos según los estándares y principios de la agricultura ecológica. ¿Cuáles son estos estándares? La agricultura ecológica debe cumplir los siguientes requerimientos:

-La rotación de cultivos, se alternan cultivos de diferentes necesidades nutricionales en varios ciclos, para que el suelo no se agote y disminuya el efecto de plagas y enfermedades.

-La ausencia de productos químicos sintéticos, en la agricultura ecológica no se usan pesticidas ni fertilizantes químicos sintéticos y tampoco se utilizan antibióticos u otras sustancias de síntesis potencialmente perjudiciales par a las plantas, los animales y los suelos.

En la agricultura ecológica, se pueden usar métodos naturales para fertilizar (como el compost, estiércol…) o luchar contra las plagas (por ejemplo, sustancias naturales como el extracto de cola de caballo) y enfermedades; pero no sustancias peligrosas, como las que se emplean en la agricultura industrializada convencional.

-Nada de organismos genéticamente modificados (OGM). Los cultivos de transgénicos no tienen cabida en la agricultura ecológica.

-Biodiversidad, hay que respetarla y reforzarla usando especies autóctonas que estén adaptadas al entorno local, sean animales o vegetales.

-El ganado ecológico debe ser alimentado con pienso orgánico, esto significa que el pienso debe estar producido por la agricultura ecológica, que sigue estos mismos estándares que mencionamos. Además, los animales viven al aire libre en corrales y con un formato de cría natural que respeta su bienestar y ciclos vitales. Nada de gallinas encerradas en jaulas minúsculas o reses etabuladas.

Además, se procura, en la medida de lo posible, seguir una política de kilómetro cero y mínimas emisiones y contaminación. Los recursos necesarios (como podría ser el estiércol o los piensos), deben producirse y emplearse en la misma explotación o muy cerca de ella. De esta manera, se minimizan las emisiones de carbono derivadas de la quema de combustibles fósiles en el transporte.

Quizá sepas de algún alimento que cumple muchos o todos estos requerimientos. Por ejemplo, verduras de producción local de las que sabes que se cultivan de forma natural. Pero solo con la certificación oficial se puede garantizar el estricto cumplimiento de los principios de la agricultura ecológica. Así que, si dudas: ¡busca el logotipo certificado!

Con estos principios, no solo se cumple la normativa legal, sino que se persigue garantizar un sistema ético de comportamiento respecto a los alimentos y otros productos elaborados, el ecosistema rural y la sostenibilidad medioambiental en general. Gracias a la agricultura ecológica obtenemos vegetales y carnes de calidad, así como derivados (leche ecológica, cuero, fibras como la lana, algodón, lino o cáñamo orgánicos) que, en gran medida, serán las materias primas de buena parte de los productos ecológicos que seguiremos viendo.

 

 

¿Qué alimentos orgánicos puedes encontrar?

El surtido disponible es tan amplio como puedas imaginar y va desde las verduras, hortalizas y frutas de temporada y producción local que puedas ver en las tiendas eco hasta las carnes ecológicas más suculentas. Y, con estos alimentos, se crean otros derivados de todo tipo: aceites, conservas, pastas, cereales, panes, patés vegetarianos (o no), embutidos… Simplemente, da un repaso a los catálogos y sorpréndete de lo varia da y deliciosa que puede ser tu dieta con alimentos ecológicos.

La leche de cabra o vaca de producción ecológica se puede tomar tal cual, pero también permite elaborar deliciosos derivados lácteos que, de verdad, debes probar. Recuperarás el auténtico sabor de la leche fresca y nata y los deliciosos yogures, cuajadas y quesos de todo tipo.

¿Y el pescado?

Seguramente, te lo has preguntado alguna vez. Pues bien, el pescado puede ser de acuicultura ecológica. Se cría en granjas marinas o fluviales, en las que vive libremente y donde se controla la composición del agua. La filosofía que se persigue es la misma que con el resto de la producción de la agricultura ecológica, con el punto de mira puesto, especialmente, en la peligrosísima situación en la que se encuentran los caladeros de todo el mundo. Según la FAO, el 70 % de las reservas de peces de relevancia económica están agotadas. ¿No es motivo sobrado para que apuestes por la acuicultura ecológica?

Desde hace un tiempo, la agricultura orgánica también se está introduciendo en el mundo de los vinos y licores. Diversas bodegas españolas están creando vinos de uva ecológica, en exclusiva o como parte de su producción convencional habitual. Son vinos especialmente cuidados para garantizar la calidad y el respeto por el producto y medio ambiente.

Y, si siempre has sido un gran aficionado de los refrescos de cola: ¡deja de lamentarte! Los tienes ecológicos.

 

 

Cosméticos ecológicos y otros productos para la salud

Si nos importa lo que comemos y nos preocupan los pesticidas y fertilizantes tóxicos que podríamos ingerir: ¿qué decir de los productos que son, básicamente, artificiales? La cosmética convencional se elabora con miles de sustancias químicas de síntesis con las que entramos en contacto diariamente.

Aunque parezcan cantidades muy pequeñas, a diario nos exponemos a muchísimas dosis de cosméticos, sea en forma de jabones y champús o crema de manos o corporal, bálsamos y maquillajes. Nuestra piel entra en contacto con esas sustancias y puede absorberlas. Y no son, precisamente, sustancias inocentes. Son sustancias potencialmente tóxicas, irritantes o, incluso, cancerígenas.

La alternativa, por supuesto, está en la ecología. Los cosméticos orgánicos no están regulados como la agricultura ecológica, pero hoy en día existen controles formales y certificaciones, como el sello Ecocert. Son certificaciones que imponen que los cosméticos se hayan fabricado:

-Con ingredientes naturales o procedentes de la agricultura ecológica.

-Sin colorantes, perfumes sintéticos, ingredientes derivados del petróleo, siliconas, transgénicos e ingredientes de origen animal (salvo los naturales en sí mismos, como la leche, miel…).

-Pasando por controles exhaustivos en el proceso de elaboración.

Los cosméticos ecológicos en el mercado son, como los alimentos, diversos y para todos los gustos. Encontramos productos de higiene como champús, geles y jabones formulados con ingredientes naturales y orgánicos muy variados, pero siempre sin siliconas, parabenos, colorantes o perfumes sintéticos. Existen lociones, cremas corporales, cremas de manos, espumas de afeitar… ¿Sabías que existen pastas de dientes ecológicas?

¿Y los artículos ecológicos de higiene íntima femenina?

Artículos como compresas y tampones siempre han estado en el punto de mira, por la poca transparencia en su composición, pero debes saber que existen en versión orgánica. El cuidado de la piel, del cabello o de las zonas íntimas se puede dejar en manos de los productos bio, más naturales y con menos formulación sintética.

En definitiva, la cosmética natural o ecológica responde, como la convencional, a las necesidades y gustos de los clientes. Por eso, hay un amplio abanico para elegir. También en los maquillajes, un sector que también está presentan do sus productos cosméticos en la línea de los patrones de la producción ecológica. ¿Lápiz de labios ecológico? Sí. ¿Esmalte de uñas natural? Pues sí. ¿Colorete? Por supuesto.

 

 

Ropa y moda ecológica

La producción de las fibras para tejidos (especialmente, el algodón), está envuelta en gran polémica por el insostenible consumo de agua y la inmensa cantidad de pesticidas y fertilizantes industriales que precisa. Por ejemplo, en la India, el 55 % de los pesticidas del país se usa en el cultivo de algodón… que solo ocupa el 5 % de su tierra agrícola. No menos importante son las abusivas prácticas comerciales y situación laboral de los trabajadores del algodón (muchos de ellos son niños). Las grandes corporaciones del textil se aprovechan de la permisividad de gobiernos del Tercer Mundo en sus prácticas mercantiles e industriales.

El algodón orgánico no es solo una necesidad medioambiental. Es una necesidad ética. La Norma Textil Orgánica Global definió en 2002 cuáles eran los criterios para considerar la ropa como “ecológica”. Esta norma abarca desde cómo debe ser la materia prima y fabricación del tejido hasta la distribución del producto. La ropa y moda ecológica siguen ese estándar.

La mayor parte de la producción de ropa ecológica se hace con el algodón orgánico, cultivado según los criterios d e la agricultura ecológica y en la línea del comercio justo. Esta ropa es sostenible medioambientalmente y limpia tanto para los ecosistemas como en lo social.

¿Te vistes de orgánico?

No es solo camisetas. Si lo tuyo son los pantalones vaqueros, ya puedes tenerlos eco. Existen múltiples diseñadores y casas fabricantes de ropa ecológica que nos ofrecen todo tipo de prendas, a cada cual más estilosa y bonita. ¡Vístete verde!

Artículos ecológicos y alimentación para mascotas

La industria de los productos para mascotas está en auge y genera tantos residuos y consume tantos recursos como cualquier otra, así que lo lógico es que, si vives en verde, también lo hagas con tus animales de compañía.

El primer aspecto destacado es la alimentación ecológica para mascotas. Para tu perro o gato, existen piensos orgánicos holísticos, elaborados con productos vegetales y cárnicos de la agricultura ecológica. Carnes de calidad para consumo humano procedente de animales criados de manera saludable y vegetales sin fitotoxicos ni transgénicos. También está disponible la opción vegetariana, formulada de manera que sea apta para perros y gatos. Todo sin colorantes, aromatizantes ni otras sustancias artificiales innecesarias.

El sector de la alimentación ecológica para mascotas también se extiende a los snacks, galletas, premios y demás alimentos, fabricados de forma artesanal con ingredientes ecológicos.

Hay mucho más. Al igual que para los humanos, los animales pueden acudir a la cosmética. En este caso, sobre todo, enfocada al cuidado de la piel y el pelo. Aceites, suplementos veterinarios… ¿Alguna vez te has curado una irritación de la piel con áloe vera? Pues puedes hacer lo mismo con tus mascotas y aplicarles pomadas orgánicas de áloe vera que protegen la piel a la vez que embellecen su pelo.

Encontrarás ropa, mantitas, correas, arneses, juguetes y mobiliario para mascotas de producción ecológica. Construidos con maderas de cultivo sostenible, algodón orgánico, cuero ecológico o cáñamo, podrás ofrecer a tus mascotas case tas, camitas y rascadores en todo tipo de diseños.

 

 

Artículos ecológicos para el huerto urbano y jardín

Hablábamos al principio de los requisitos de la agricultura ecológica. ¿Eres de los que se ha lanzado a la gratificante experiencia de cultivar en casa? Entonces, sabes muy bien cuáles son los motivos para preocuparse por las buenas prácticas en el huerto. O tal vez no cultives tus propias lechugas, pero tengas un jardín bonito y florido. Sea lo que sea, tienes a tu disposición un amplio surtido de artículos ecológicos para utilizar en tu afición.

En Agro Rosa sabemos la importancia que tiene evitar los productos químicos sintéticos a la hora de fertilizar y luchar contra plagas y enfermedades. Quizá no tengas tiempo, espacio o habilidad para elaborar tu propio compost o pesticida. Pero tienes la posibilidad de comprar compost, estiércol, humus de lombriz… y también sustratos especializados.

La opción de los tratamientos ecológicos para las plagas te parecerá muy interesante. ¿Sabías que puedes luchar contra los hongos con purín de ortiga? Pues no hace falta que lo elabores tú mismo. ¿Sabías que la tierra de diatomeas lucha contra las plagas a la vez que fertiliza la tierra? El mundo de la horticultura es grande y hay mucho por aprender.